

Esta versión del compacto que Toyota produce en el Reino Unido es el primer modelo de su segmento con un sistema de propulsión híbrido (tras su «primo gemelo» premium, el Lexus CT 200h), gracias al cual el Auris HSD declara unas emisiones de CO2 de 89 g/km.


Este Prius cuenta con las ventajas de la variante convencional, en la que el motor eléctrico supone un complemento para el de combustión interna, pero además le añade la posibilidad de recargar la batería en una toma de corriente doméstica (220 V) en una hora y media.