Su motor bóxer sobre-alimentado de 2,5 litros de capacidad es uno de los puntos fuertes de este aparato, que entrega 300 CV de potencia a 6.700 rpm. Equipado con un intercooler de mayor tamaño y con distribución variable tanto en las válvulas de admisión como en las de escape, se ha logrado para la edición 2011 de este propulsor una mejor respuesta en todo el rango de funcionamiento.
Aunque este elaborado sistema de transmisión a las cuatro ruedas está pensado para asegurar un comportamiento óptimo en cualquier circunstancia, Subaru también ha dispuesto un control de estabilidad VDC, desconectable por fases, que libera el control de tracción TCS o toda ayuda electrónica (excepto el ABS) si así es requerido por el conductor.
En ambos casos se han sustituido algunos componentes por otros más rígidos, además de amortiguadores y muelles más duros, y barras estabilizadoras de mayor diámetro.
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Los frenos siguen llevando la firma de Brembo, con discos ventilados, pero ahora incorporan ciertas mejoras entre las que se pueden encontrar unos latiguillos con menor expansión.
El equipo de ruedas, por su parte, se confía a unos Dunlop SP600 de medidas 245/40 R 18 y que, según la marca, cada uno de ellos pesa dos kilos menos que uno convencional. En lugar de las llantas de fundición aluminio de serie 18 x 8 ½, se pueden solicitar unos aros de aluminio forjado, acabadas en color negro intenso, realizadas por el especialista BBS.
Las mejoras aplicadas al Subaru Impreza WRX STI también afectan al interior, en el que puede encontrarse un nuevo sistema manos libres Bluetooth, volante con mandos adicionales para el audio, entre otros.
| Versiones | P.V.P. |
| Subaru Impreza WRX STI Sedán | 42.950 € |
| Subaru Impreza WRX STI Hachback Sport | 45.650 € |
| Subaru Impreza WRX STI Hatchback Sport Plus | 49.700 € |
