La actual gama de modelos de Lotus va camino de desaparecer del catálogo, al menos los Elise y Exige que montan los motores Toyota 2ZZ-GE de 1,8 litros.
Eso es lo que se afirma desde el Club Golden Gate Lotus, donde aseguran que Lotus Cars ha notificado a los concesionarios de Estados Unidos que Toyota ya ha cesado la producción de dichos propulsores, y que el productor británico de deportivos ha estado construyendo unidades con los bloques que tenía en stock.
El fin definitivo de la producción tendrá lugar en julio de 2011, y entre junio y agosto de este mismo año se hará entrega en Norteamérica de las últimas unidades del Lotus Elise y el Lotus Exige, en una gama estructurada en tres versiones denominadas “Final Edition”.
Los concesionarios de EEUU y Canadá contarán con 25 ejemplares del Lotus Exige S260 Final Edition, basado en el Lotus Exige Scura europeo, con la variante sobrealimentada del 1.8 del cuatro cilindros japonés, que entrega 257 CV. Está asociado a un cambio manual de 6 velocidades, control de tracción y launch control.
El Lotus Exige S260 Final Edition será una variante potenciada a 257 CV del Exige 240, en el que se podrá elegir el color en las 30 unidades que llevarán a esos mercados.
Finalmente, para los 15 Lotus Elise SC Final Edition exportados a América se mantendrá la versión atmosférica de 220 CV del 1,8 del Lotus Elise “Club Racer”.
De esta manera, poco a poco van desapareciendo todos los motores de alto rendimiento tal y como los entendíamos hasta ahora, los que basaban su eficacia sobre todo en la alta capacidad de subir de vueltas. Éste había sido el caso del celebrado 2.0 de Honda, que había llegado a los 240 CV montado en el roadster S2000, lo mismo que le ocurrirá próximamente al dos litros del Renault Clio Sport, otro atmosférico de cuatro cilindros para el que la firma francesa ya tiene desarrollado un sustituto con 1.600 cc, turbo e inyección directa.
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Tendré que ahorrar y comprar uno de segunda mano o hacerme rico antes del verano.