


Desarticulado el equipo nipón, Peterhansel y Cottret desembarcaron el pasado año en X-raid, preparador alemán que cuenta con el apoyo de BMW para hacer correr, con muy buenos resultados, a los veteranos pero competitivos BMW X3 CC. El territorio suramericano, sin embargo, se le resiste los franceses, que en las dos ediciones disputadas en las pistas de Argentina y Chile no han conseguido aún subir al podio. En cualquier caso, en el Dakar 2011, la tropa de X-raid está formada por otras 6 unidades más entre las que se encuentra el Mini All4 Racing gobernado por Guerlain Chicherit y Michel Périn.


Con esta escuadra y con las mejoras introducidas en su montura, el objetivo no puede ser otro que «lograr el triunfo por tercera vez consecutiva», asegura Kris Nissen, director de Volkswagen Motorsport.
Nani Roma, por su parte, ha mostrado en varias ocasiones su satisfacción por haber encontrado, a última hora, una montura competitiva para hacer frente al Dakar 2011. El equipo belga Overdrive ha proporcionado al ganador en motos en 2004 y tercero en coches en 2006 un Nissan Navara que, si bien está a cierta distancia de los coches alemanes, los 300 CV que entrega su motor V6 de gasolina VQ40 deberían permitirle mantener un ritmo muy cercano a los de cabeza.

La carrera se disputará durante 15 días, entre el 1 y el 16 de enero, en los que los participantes deberán recorrer los Andes en dos ocasiones, con altitudes de hasta 4.700 metros y pistas rápidas con grava y suelo duro.
Esta edición, además, cuenta con etapas localizadas más al norte, con lo que es de esperar mayores contrastes de temperaturas. El desierto de Atacama es, sin embargo, el espacio que mejor define la dureza del Dakar. La organización ha dispuesto allí 6 especiales, de las 14 que componen el rally, sobre las dunas de fina arena.

Inicialmente se había propuesto un radio de 400 metros pero, como dice Dirk von Zitzewitz, «para los equipos aficionados o, aún más complicado, para los motoristas, que tienen que conducir y navegar al mismo tiempo, este margen habría resultado demasiado corto. Probablemente se habrían perdido y luego habrían tenido que volver atrás, provocando tráfico en sentido contrario».