

El propulsor de combustión interna, por su parte, tiene una capacidad de 660 cc y su función es la de recargar los acumuladores, lo que supone un paso más allá sobre la tecnología híbrida utilizada actualmente, en la que el motor convencional tiene el peso principal de la propulsión.
Gracias al sistema utilizado por Suzuki, este Swift puede circular hasta 20 km con cero emisiones y, por otra parte, permite recargar la batería cuando el coche se encuentra estacionado.