Cuatro años han pasado desde que el último Honda Civic Type R saliera a la calle. Muchos. Quizá demasiados. Por eso, como aun faltan unos meses para que la cuarta generación llegue a la calle (durante 2015…), la marca ha desarrollado el Honda Civic Type R Concept II, para ir abriendo boca en el Salón de París 2014.
Tras un periodo de reflexión, en el que se habían centrado en el desarrollo de coches más eficientes y comerciales, parece que en Honda están volviendo por sus fueros y quieren recuperar parte de ese prestigio como productor de modelos radicalmente deportivos. El futuro Honda NSX es un claro ejemplo de ello.
Y el nuevo Honda Civic Type R es el otro, si nos atenemos a los datos que está dejando caer la marca con cuentagotas. De hecho, incluso afirman que es el Type R de mejor rendimiento de la historia, incluidos el Integra Type R y el NSX Type R (que sólo se comercializó en Japón).
Para conseguirlo, bajo la carrocería de cinco puertas el Civic actual se va a instalar un motor 2.0 i-VTEC turbo de unos 280 CV. Este propulsor proviene de la serie de bloques eficientes Earth Dreams Technology, con la señalada novedad de la sobrealimentación. Y sí, los puristas se rasgarán las vestiduras echando de menos los brillantísimos motores atmosféricos de los anteriores Type R. Antes, sin embargo, han de saber que Honda ha desarrollado una mecánica que entrega la potencia máxima a 7.000 rpm, no cual no está nada mal para un motor turbo.
Por otra parte está el bastidor, dotado una amortiguación adaptativa, regulable en cuatro niveles de dureza, y con un sistema de dirección que mejora la tracción.
Todo ello se combina con el nuevo modo de conducción +R, pensado para rodar en circuito. Pulsando la tecla ubicada a un lado del volante se modificarán la respuesta del motor, la dirección y la suspensión.
Y un detalle más: el cambio de marchas será manual de seis velocidades. No en vano, cuando se trata de ir realmente rápido, no hay electrónica que mejore las prestaciones de un conductor experto… Es de esperar que el tacto también respete la herencia dejada por sus predecesores.
