Los rumores que atañen a Fernando Alonso tienen en la mayoría de las ocasiones un gran fondo de verdad. Luego, por cosas que pasan –o no-, esos rumores se pueden hacerse realidad o quedarse en el olvido. Pero que algo ha habido, de eso podéis estar seguros en casi todos los casos.
El último de ellos acaba de confirmarse: el piloto asturiano de 38 años, dos veces campeón del mundo de Fórmula 1, dos veces ganador de las 24 Horas de Le Mans, actual campeón del Mundial de Resistencia FIA (WEC) y ganador de las 24 Horas de Daytona, se está preparando para disputar el próximo Dakar 2020.
Lo haría a los mandos de un Toyota Hilux del equipo Toyota Gazoo Racing (la estructura deportiva oficial del constructor japonés), es decir, el mismo que le ha devuelto a la senda ganadora –y de paso la sonrisa-.
De todas formas habrá que estar atentos, porque de momento no hay confirmación oficial, sino más bien una declaración de intenciones que tiene un punto de eficaz operación de marketing por parte de Toyota.
Los rumores de la participación de Fernando Alonso en el Dakar brotaron con fuerza el pasado marzo de 2019.
El piloto asturiano estuvo probando en Suráfrica el Hilux con el que Nasser Al-Attiyah ganó la última edición de la prueba. Y claro, por mucho que fuera una “simple” toma de contacto, cualquiera que haya seguido un poco las últimas inquietudes de Alonso debería tener más o menos claro que detrás de ese test tenía que haber una segunda intención.
Tanto se habló de ello que incluso se especuló con su presencia en la Baja Aragón 2019, dominada por los Mini de Orly Terranova y Nani Roma. Visto con perspectiva, sin embargo, se puede pensar que habría sido una temeridad participar en una carrera tan seria como la que se disputa en las pistas de Teruel sin una preparación previa en condiciones.
De modo que, de momento, lo que Toyota sí ha confirmado son las dos primeras fases de esta puesta a punto: la primera, unos tests en Namibia del 20 al 23 de agosto, en los que Alonso cuenta con la inestimable ayuda de Giniel de Villiers, ganador del Dakar 2009; y la segunda, la participación de forma “no competitiva” en el Rally Harrismith 400, la quinta prueba de las “South African Cross Country Series” que se disputa los días 13 y 14 de septiembre.
Habrá que ver cómo de no competitivo será este debut de Fernando Alonso en una prueba de todoterreno, en la que no solo tendrá que aprender a conocer los límites de su coche en pista off-road, sino que también deberá acostumbrarse a que una voz le diga por donde debe tirar.
Marc Coma se estrenaría como copiloto
Y aquí está la siguiente novedad sorprendente: el copiloto con el que disputaría el raid será Marc Coma, según aseguran en Marca. El de Avià parece echar de menos el sabor de la arena desde su puesto actual de director general de KTM España, y añade un aliciente más al reto.
Habrá quien tenga dudas, porque eso de debutar como copiloto de Alonso y en un coche pata negra es como para pensárselo, pero hay que recordar que este expiloto se retiró en 2015, poco después de ganar su quinto Dakar en moto. Así que de navegación al límite algo sabe. Y miedo a la velocidad y a la presión no se le suponen.
Van a ser por tanto cinco meses de intensas sesiones de adaptación al coche, y del uno al otro, repartidas entre Europa, África y Oriente Medio.
Tras las dos mencionadas, Alonso y Coma tendrán la oportunidad de participar en varias carreras del calendario internacional de Rallies Todoterreno, empezando por la Baja Jordania o el Rally de Marruecos.
Estas carreras serán cruciales para medir su competitividad en condiciones reales y para tomar la decisión final de participar o no en el Dakar 2020, que tras una década celebrándose en tierras suramericanas se traslada por primera vez a Arabia Saudí.
