El Porsche 911 es, sin duda, el coche acumula un mayor número de éxitos en competición. Y ello lo ha conseguido, además, con una configuración de motor y caja de cambios colgados sobre el eje trasero que hace años que no utiliza ningún otro fabricante.
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Esta estructura aporta indudables ventajas en motricidad (al menos en línea recta) y en frenada (ídem), pero obliga a tener un dominio y una sensibilidad muy bien educados al volante para sacarles el máximo partido… en seco.
En situaciones de adherencia limitada las dificultades se incrementan de forma exponencial, de ahí que Porsche desde hace tiempo pone a disposición de sus clientes varias soluciones que les permitan disfrutar de sus vehículos en cualquier circunstancia. Una de ellas es la tracción total, fiel aliada del Porsche 911 desde que lanzó el primer Carrera 4, allá por el año 1989.
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Otra de ellas son los cursos de conducción de la Porsche Driving Experience, que ahora arrancan la temporada de invierno 2013. Estructurados en tres niveles, Camp4 Finnland, Camp4S Finnland y Ice-Force, se trata de eventos de tres días de duración, que se celebran entre enero y marzo, en los que los se enseña a los asistentes a dominar un Porsche en las extremas condiciones del frío helado de Finlandia (también realizan cursos similares en Suiza, Italia, Canadá y China).
Porsche pone a disposición de los interesados una página web de contacto, donde se encuentra información detallada y los precios, que van entre los 3.890 y los 5.690 euros, en los que se incluyen, además del propio curso, la comida, el alojamiento y ropa de abrigo.
