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El polivalente de Volkswagen ya cuenta en su gama con el sistema de Gestión Activa de Cilindros (ACT) incorporado a la variante de 140 CV del motor 1.4 TSI, en que se combinan la inyección directa de gasolina, turbocompresor y compresor.
Gracias a la desconexión selectiva de los cilindros dos y tres cuando no hay gran demanda de potencia, la marca asegura que el consumo se ve reducido en unos 0,4 l/100 km en condiciones de carga baja y media, ahorro que llega a 1,0 l/100 km cuando se circula a una velocidad constante de 50 km/h en tercera o cuarta velocidad.
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Disponible con caja de cambios manual de 6 velocidades o la de doble embrague DSG de 7, el consumo medio y las emisiones quedan homologados en 4,6 y 4,5 l/100 km, y 107 g/km y 105 g/km respectivamente. Esto significa que las ventajas del nuevo sistema de distribución se perciben cuando se asocia con el cambio automático, ya que en el 1.4 TSI “convencional” con DSG el consumo era de 5,3 l/100 km, mientras que el manual declaraba los mismos 4,6 l/100 km.
Las cifras de prestaciones, por su parte, se mantienen también, con una aceleración de 0 a 100 km/h en 7,9 segundos y una velocidad máxima de 210 km/h.
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El motor 1.4 TSI con ACT está disponible con el acabado BlueGT, que cuenta con llantas de 17 pulgadas, alerón en el techo, paragolpes específicos, estriberas y suspensión rebajada en 15 mm.
El Volkswagen Polo BlueGT 1.4 TSI ACT con cambio manual cuesta 19.510 euros, mientras que la variante con cambio manual sube hasta los 21.040 euros. Ambos están disponibles con carrocería de 3 puertas o la de 5 puertas, en cuyo caso hay que añadir 625 euros más (incluye los elevalunas eléctricos traseros).
