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El BMW i8 Concept Spyder no es una mera recreación descapotada del deportivo híbrido que la firma bávara está ultimando. Aunque parte de la misma concepción ligera del prototipo presentado en el Salón de Frankfurt 2011, con una estructura del habitáculo hecha de fibra de carbono con refuerzo plástico (CFRP), más un módulo de aluminio donde se sustentan los órganos técnicos, en este nuevo prototipo en lugar de una configuración 2+2 se ha optado por un compartimento biplaza y una distancia entre ejes inferior.
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Lo que sí comparte con su hermano Coupe es la configuración propulsora híbrida Plug-in, que monta en el eje delantero un motor eléctrico de 131 CV, alimentado por una batería de ion-litio, más un propulsor turbo tricilíndrico central de 223 CV que funciona en tándem. Entre los dos entregan 354 CV de potencia y 550 Nm de par.
La batería, que se encuentra en el túnel central, entre los módulos del eje delantero y el trasero para garantizar un reparto de peso entre ejes 50:50, se puede recargar por completo en un enchufe doméstico en menos de dos horas. Así, el BMW i8 Concept Spyder puede circular en modo eléctrico hasta 30 kilómetros.
