El principal cambio reside en el motor. Es el mismo que monta el Mercedes-Benz SLR McLaren Roadster 722 S. Se trata de un bloque de 8 cilindros en V y 5,4 litros de cilindrada con sobrealimentación. Se fabricará a mano en la factoría que tiene AMG en Affalterbach, Alemania. Obtiene una potencia de 650 CV, acelera de 0-100 en 3,5 segundos y alcanza una velocidad punta de 350 km/h. Entre los vehículo de su misma categoría no hay ninguno con unas prestaciones similares. El único modelos capaz de batirle es el Lamborghini Murciélago LP640, que acelera de 0 a 100 en 3,2 segundos, aunque la velocidad punta es inferior a la del Mercedes.

Con esta edición del SLR, Mercedes pone fin a su convenio con el fabricante de chasis ingles McLaren que concluye el año próximo.
