Los mejores motores del mundo 2009 (VI): Audi 2.0 TFSI

A pesar de ello, aunque la tendencia del ‘downsizing’ se está abriendo camino entre los fabricantes, las mecánicas de mayor calado en Europa todavía siguen siendo los motores de 4 cilindros en línea en torno a los 2.000 centímetros cúbicos de capacidad.

Y, sobre todos ellos, reina incontestable el 2.0 TFSI que utilizan las marcas del Grupo Volkswagen. Estrenado en 2004 en el Audi A3 Sportback con una potencia de 200 CV, ha recibido diferentes evoluciones que han permitido ubicarlo en modelos tan variopintos como el Volkwagen Passat o el Skoda Octavia, el Seat Altea o el Audi A6.

La última generación del Volkswagen Golf GTI y los nuevos SEAT León FR y Altea Freetrack también aprovechan las bondades de esta mecánica que, especialmente en el caso de las versiones deportivas de las berlinas compactas, es una de las principales responsables de sus reconocidas cualidades dinámicas.

Sin embargo, la que ha seducido a los periodistas que conforman el jurado de los ‘International Engine of the Year Awards 2009′ es la última evolución de su versión más equilibrada, que entrega 211 CV y que ha sido elegida como el mejor motor de entre 1.8 l y 2.0 l.

En la actualidad se monta en todas las carrocerías del Audi A4 (incluido el Allroad) y el A5 (también el Sportback) y en el SUV medio de la marca, el Q5.

Esta nueva versión del 2.0 TFSI cuenta, por otra parte, con el apoyo del AVS, que le permite ofrecer un rendimiento muy lleno en un amplio rango de revoluciones y que en el caso del Audi A4 se traduce en un par máximo de 350 Nm desde sólo 1.500 rpm hasta bien pasadas las 4.000 rpm.

Otras de sus características destacadas son unos nuevos inyectores de seis orificios que pulverizan la gasolina en la cámara de combustión a una presión de 150 bares, un turbocompresor mejorado y un intercooler más compacto y liviano a la par que eficiente, así como una bomba de aceite de caudal regulado y control de presión en dos etapas.