- © Aston Martin
Aston Martin se ha propuesto reforzar el papel de su icónico DB9 en el segmento de los grandes GT con un importante paquete de mejoras que afectan al motor y las suspensiones además del aspecto exterior del deportivo.
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Para empezar, el V12 de 6,0 litros hace suya la arquitectura VH desarrollada para el Vanquish, pero con adaptaciones considerables a las características específicas del DB9. El resultado es un par motor de 620 Nm y una potencia de 517 CV.
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Las mejoras introducidas a nivel de chasis comienzan por los frenos carbocerámicos Brembo, de serie en todas las versiones y con un diámetro de 398 mm delante y 360 mm detrás, que además ahorran hasta 12,5 kg respecto a los convencionales.
Siguiendo la arquitectura VH, el DB9 montará por primera vez el sistema de suspensiones Adaptative Damping System. El ADS incluye los modos Normal, Sport y Track, cuyo cometido es pasar paulatinamente del comportamiento de un coche de lujo al de un deportivo radical para ser utilizado en circuito.
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En el apartado puramente estético, las modificaciones introducidas por Aston Martin gozan como es habitual de la sutileza necesaria para que los muchos entusiastas de la marca sientan que no ha cambiado nada de lo esencial. Con todo, los cambios han intentado crear superficies más fluidas recogiendo algunos de los planteamientos del Virage, que cesa definitivamente la producción.
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Destaca la nueva parrilla frontal parcialmente inspirada en la del One-77, con tomas de aire que mejoran la ventilación de los frenos cerámicos de serie, o la nueva firma luminosa con faros bi-xenón y luces de tecnología LED. En el interior, se podrán montar por primera vez los nuevos asientos ligeros de fibra de carbono y kevlar, 17 kg más ligeros en conjunto que los de serie.
El nuevo Aston Martin DB9 estará disponible de forma inmediata en sus variantes Coupe y Volante a partir de octubre a un precio de salida de 174.994 €.
